Según el Ministerio de Educación es “imprescindible” alcanzar el acuerdo para garantizar el desarrollo de las competencias clave
El Ministerio de Educación y Formación Profesional (MEFP) ha desarrollado el ‘Marco de referencia para la competencia digital docente’. El documento, que publica ahora el Boletín Oficial del Estado, es fruto del acuerdo alcanzado con las Comunidades Autónomas durante la Conferencia Sectorial de Educación celebrada el pasado 14 de mayo y permitirá el adecuado desarrollo de la competencia digital de los docentes y de los centros educativos.
Según un comunicado del Ministerio que dirige Isabel Celaá, el acuerdo abordaba los temas referentes para la elaboración de orientaciones que ayuden a las CCAA y a los centros educativos a diseñar sus propios planes de contingencia que permitan garantizar el desarrollo de la actividad educativa, respetando tanto las competencias de cada una de las CCAA como la autonomía docente de los centros educativos.
Este marco de referencia sienta las bases para el diseño por parte de las diferentes Administraciones de aquellas políticas educativas encaminadas a mejorar el desempeño de los docentes en esta materia.
Por otro lado, también divide las competencias en cinco áreas: Información y alfabetización Informacional, Comunicación y colaboración, Creación de contenidos digitales, Seguridad y Resolución de problemas. Cada competencia se divide en tres niveles (básico, intermedio, avanzado) y está definida por diferentes descriptores.
“Alcanzar un adecuado grado de desarrollo de la competencia digital de los docentes y de los centros educativos es imprescindible para garantizar la adquisición y desarrollo de las competencias clave por parte de los estudiantes y, en último término, de todos los ciudadanos.”, han expuesto dentro del comunicado por el propio Ministerio de Educación y Formación Profesional.
La competencia digital se considera una de las capacidades clave del aprendizaje y, por ello, una de las cuestiones a las que se debe prestar especial atención, según las Recomendaciones del Consejo Europeo. “La competencia digital es, por un lado, un elemento indispensable de la alfabetización elemental del siglo XXI”, aseguran. Pero, además, “la tecnología ofrece vías esenciales de acceso al conocimiento, de colaboración y construcción del saber, y amplía y potencia las estrategias pedagógicas para mejorar el aprendizaje y ofrecer recursos y herramientas personalizados”, aportan.
En línea con estas recomendaciones europeas, la digitalización es uno de los pilares del Proyecto de Ley de Educación o ‘Ley Celaá’ que tiene como objetivo “aumentar las oportunidades educativas y formativas de toda la población, contribuyendo a mejorar su nivel competencial por medio de la aprobación de un currículo moderno, flexible y ágil”, según la propia Celaá. También forma parte del eje transversal de las reformas emprendidas por el MEFP, como el Plan Estratégico de Formación Profesional o la reforma de la profesión docente, que pretende actualizar esta etapa formativa mejorando la empleabilidad y satisfaciendo las necesidades del mercado laboral, así como consolidar la flexibilización de estas enseñanzas que permiten al alumno una alta cualificación y garantizando una experiencia laboral de calidad que sirve para impulsar un currículo profesional competitivo. La prioridad fundamental es la colaboración y participación de las empresas para fomentar la contratación.