La ministra de Educación, Isabel Celaá, afirma que la clases presenciales son irremplazables
La ministra de Educación y Formación Profesional, Isabel Celaá, ha presidido hoy la Cumbre Internacional sobre la Profesión Docente (Virtual 2020 International Summit of the Teaching Profession), que está dedicada a las Respuestas de los Sistemas Educativos a la pandemia.
Esta importante reunión, en la que se dan cita anualmente los ministros de Educación de los países de la OCDE y representantes sindicales docentes, se iba a celebrar este año en Valencia, organizada por el MEFP, la OCDE y la federación de sindicatos bajo el título No dejar a nadie atrás (Leaving no one behind), pero se ha sustituido por una cita telemática enfocada en la respuesta de los sistemas educativos a la pandemia.
“La educación presencial es irremplazable, pero si algo se ha puesto de manifiesto durante esta crisis es que el papel del profesor, la función docente, es más importante que nunca. Estoy muy orgullosa de la respuesta del sistema educativo español durante el confinamiento. En un país descentralizado como este, la cooperación y el alineamiento entre las administraciones educativas a nivel central, autonómico y local han sido más estrechos que nunca”, ha señalado Celaá durante su discurso inaugural. “Tanto los docentes como los estudiantes han demostrado su compromiso y capacidad de adaptación, que es muestra de su inteligencia”, ha añadido.
La ministra ha presentado algunas de las principales medidas desarrolladas por el MEFP para facilitar la continuidad de la educación durante el confinamiento, entre ellas el portal Aprendo en casa y la programación educativa en colaboración con RTVE Aprendemos en casa. Y ha subrayado que la colaboración entre diferentes actores “ha sido crucial para superar los obstáculos en tan poco tiempo”.
La cumbre ha servido además para la presentación de dos informes elaborados por la OCDE sobre las posibles estrategias para la reapertura de las escuelas y las nuevas formas de aprendizaje surgidas durante la pandemia. Por su parte, se han presentado otros dos análisis acerca de experiencias de la profesión docente en el manejo de la crisis y sobre los pasos a seguir para permitir que las escuelas se vuelvan a abrir y desarrollar en el futuro.
Esta es la primera reunión en la que se dan cita las autoridades educativas y los sindicatos docentes de los países de la OCDE para analizar el impacto del Covid-19 sobre la educación. Todos ellos han participado en un debate que ha girado en torno a cuatro puntos:
El diálogo y la Cooperación entre gobiernos, docentes y sindicatos para abordar el cierre de los centros y su impacto social y para diseñar y aplicar las medidas de cara al futuro post-desconfinamiento de la educación. Experiencias prometedoras que han surgido durante la pandemia y la importancia de la innovación en el futuro de la educación. Políticas en torno a los docentes para afianzar y mejorar la profesión. La desigualdad en los sistemas educativos y vías para hacerlos más inclusivos en todos los aspectos.
En su intervención, la ministra de Educación y Formación Profesional ha hecho hincapié en este último punto y ha subrayado que, “más allá de los datos y los informes, con una brecha digital que ha sido dolorosamente exacerbada por el confinamiento, hemos visto lo grave y dramática que es esta situación, especialmente para los niños y los jóvenes”. Celaá ha abogado por aumentar la inversión en digitalización para reducir todo lo posible esta brecha.
“La pandemia de Covid-19 nos ha recordado algo esencial como sociedades: o superamos sus efectos juntos o, de lo contrario, no saldremos de ella”, ha concluido la ministra.
La celebración de la Cumbre Internacional sobre la Profesión Docente 2020 se hará de forma presencial el próximo año tal y como estaba previsto, con España como país anfitrión, tal y como han acordado los participantes y organizadores.