Las relaciones sociales de amistad en la educación secundaria (en el instituto) son una de las más duraderas en el tiempo de estudio. Por ello, universidades españolas han intentado explicar cómo seleccionas tu grupo.
Investigadores de varias universidades españolas hicieron un análisis para conocer la incidencia que tiene la personalidad a la hora de escoger las relaciones sociales de amistad que se forjan en la educación secundaria. El trabajo hizo uso de la Inteligencia Artificial y diversos análisis para determinar que estas elecciones se basan más en la cercanía de los contactos que otra cosa.
Investigadores de la Universidad Carlos III de Madrid (UC3M), la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y la Universidad Loyola han concluido que las relaciones sociales de amistad que surgen en el instituto no se generan en base a la personalidad de como son las personas -su personalidad-, sino por la cercanía de los contactos con unos y otros.
La conexión entre amigos es vital para las relaciones en el instituto
Los primeros en publicar la investigación hecha por diversos catedráticos de las universidades españolas fue la revista PNAS. Desde el punto de vista de Anxo Sánchez, uno de los autores del estudio, catedrático de Matemáticas de la UC3M e investigador del Grupo Interdisciplinar de Sistemas Complejos (GISC), en realidad, el objetivo más que buscar la predicción como tal del instituto de secundaria, es “cómo construimos nuestras amistades, al identificar las relaciones comunes y no las características personales como el principal motivo de estar conectados”.
Se hizo uso de un machine learning con Inteligencia Artificial para intentar predecir sin entre dos personas hay una relación buena o mala.
¿De qué manera se puede conocer si dos personas se llevan bien o mal?
Desde el punto de vista de los autores, y luego de haber hecho un análisis sobre las relaciones sociales del alumnado de 13 institutos de educación secundaria, incluye a más de 3.000 estudiantes y alrededor de 60.000 relaciones positivas y negativas declaradas, junto con pruebas de rasgos personales de los estudiantes, es realmente “predecible” si dos personas son amigas o se llevan mal.
La forma más fácil de identificar esto, es por medio del número de cuántos amigos, conocidos y “enemigos” tienen en común en una relación.
Esto, de alguna manera, explica el por qué, en ocasiones, los grupos de amigos del instituto no cuentan con unos mismos patrones de gustos o personalidades, pero de igual forma, se logran establecer con el paso del tiempo.
La influencia de las personas directas e indirectas que conocemos son vitales
“Esto sugiere que no solo nuestras amistades cercanas tienen un efecto en nosotros, sino que incluso personas que conocemos de manera indirecta pueden afectar nuestros comportamientos y decisiones. Este descubrimiento tiene implicaciones emocionantes para la forma en que entendemos la dinámica social y el papel que desempeñamos en ella”. señala otra de las autoras del estudio, María Pereda, del departamento de Ingeniería de Organización, Administración de Empresas y Estadística de la UPM.
La solución para el futuro y las amistades en los institutos deberían estar relacionadas con entender que” no necesitan ser iguales para ser amigos, podrían estar más dispuestas a buscar amistades con personas que tienen diferentes antecedentes, intereses y perspectivas”, argumenta Pereda.
En el artículo se proporcionan, asimismo, datos y resultados útiles para la gestión de las aulas, los institutos y centros educativos. Por ejemplo, aquellos que permitan “saber cuándo unos estudiantes se pueden encontrar en una situación de riesgo de exclusión social, porque tienen pocas relaciones buenas y muchas relaciones malas”, indica José Antonio Cuesta, coautor y profesor de Matemáticas de la UC3M.
Hoy en día, cada vez resulta más importante conocer realmente, como nuestra mente y amistades pueden influir positiva -o negativamente- en nuestro desempeño.