El 2017 es un año de oposiciones. El Gobierno anuncia reposiciones del 100% de las plazas para cubrir vacantes por jubilaciones o fallecimientos en Educación, algo que no se hacía desde el inicio de la crisis en 2008.
50.000 plazas, nada más y nada menos, para Educación. 2017 abre la veda de la oportunidad para los docentes de toda España después de que varias comunidades autónomas no convocaran ni una sola plaza de profesor en los últimos cinco años. El tira y afloja del “sin presupuestos generales no hay oposiciones para empleo” y viceversa ha creado en estos últimos años una laguna y un vacío que ahora se espera recuperar.
Este año, Andalucía, Baleares, Cataluña y País Vasco convocarán oposiciones para docentes “sí o sí” a pesar de que la tasa de reposición no esté aún fijada y a riesgo de que dichas plazas sean impugnadas, como ya ocurrió en Andalucía en 2012, según fuentes del Ministerio de Educación. La Junta de Andalucía convoca 2.468 plazas de Educación; Cataluña 2.000 plazas; País Vasco 740 y Baleares 257.
En contraposición, son ocho las comunidades autónomas que no convocarán oposiciones este año: Castilla La Mancha, Extremadura, Castilla y León, Aragón, La Rioja, Navarra, Comunidad Valenciana y Murcia. En el caso de la Comunidad Valenciana, ya anunció que 2018 será el año en el que abrirán la convocatoria para cubrir 5.000 plazas de maestro para Infantil y Primaria. De éstas, 3.600 son de libre acceso y 1.400 de promoción interna.
Las cinco comunidades autónomas restantes se mantienen a la espera, es el caso de Madrid, Cantabria, Canarias, Asturias y Galicia. Las dudas se disiparán a lo largo del mes de marzo, mes en el que estas cinco regiones deben decidir si convocarán oposiciones o no. Una decisión que depende, en algunos casos, de la seguridad jurídica, como en el caso de Galicia que afirma que la oferta de empleo público en la comunidad “está complicada si no se aprueban los Presupuestos Generales del Estado”, y en otros, de las negociaciones del Congreso de los Diputados o de las decisiones del entorno, como el caso de Canarias, que no confirmará oposiciones hasta que Madrid no anuncie su intención o no de convocar plazas para maestros.