La Conferencia General de Política Universitaria volverá a reunirse el 15 de abril
No hay una fecha clara todavía para terminar las clases, pero «nadie va a perder el curso» en «ninguna de las universidades del territorio español», según el comunicado del Ministerio de Universidades publicado tras la celebración de la Conferencia General de Política Universitaria. Eso sí, las universidades tendrán la última palabra.
A esta reunión, convocada con carácter de urgencia por el ministro de Universidades, Manuel Castells, y el secretario general de Universidades, José Manuel Pingarrón, han asistido representantes de las Consejerías competentes en materia de universidades de todas las Comunidades Autónomas. Como no ha habido un acuerdo, el próximo 15 de abril se reunirá la Conferencia.
Según la nota del Ministerio, el sistema universitario español en su conjunto ha mostrado su solidez, su calidad y su flexibilidad en las diferentes respuestas que desde cada universidad se han ido dando para mantener la actividad universitaria sin pérdida de calidad. En cierto modo, se ha producido una formación acelerada de la práctica de enseñanza virtual, prefigurando así la futura articulación necesaria entres distintos métodos de aprendizaje conforme la digitalización de nuestro sistema se despliegue plenamente, sin por ello menoscabar la importancia del contacto presencial, hoy limitado por las circunstancias..
La evolución de la pandemia en España, y en el mundo, es actualmente imprevisible, lo cual condiciona los plazos temporales en que sea posible retornar a la enseñanza presencial. Las Universidades, con el apoyo de sus Consejerías autonómicas y de este Ministerio, están organizando modalidades de enseñanza no presencial, tanto en las actividades docentes que aún se realizaran en este curso como en la evaluación final del curso. Cada universidad, en función de sus posibilidades, determinará la vigencia de dichas modalidades, así como las fechas de su aplicación según la evolución de la pandemia. Las universidades consultarán e informarán a sus estudiantes, docentes y trabajadores de las medidas adoptadas para que puedan prepararse con el tiempo suficiente para efectuar la evaluación o examen final con las debidas garantías. Se deberá tener en cuentas las condiciones propias de cada estudiante para adaptarse a las modalidades de enseñanza y evaluación que se decidan.
Las prácticas presenciales que forman parte esencial de algunas enseñanzas deberán adaptarse a las posibilidades de realización, tanto en la forma como en sus tiempos de realización, que podrían desplazarse al curso siguiente o a los meses de verano.
La validación de la calidad de las enseñanzas, y de los títulos correspondientes, completadas bajo nuevas modalidades en función del estado de emergencia se realizará por las Agencias de Evaluación de cada Comunidad Autónoma, en coordinación con la ANECA para acordar criterios homólogos. Esta ya convocada una reunión de todas las Agencias de evaluación, incluida la ANECA, el viernes 3 de abril.
Las decisiones últimas sobre la adaptación de la enseñanza universitaria a las condiciones de emergencia sanitaria en las que nos encontramos corresponden a las universidades en el ejercicio de su autonomía en colaboración con la autoridad competente de tutela, a saber, la Comunidad Autónoma a la que pertenecen. Sin embargo, cualquier decisión debe respetar las medidas sanitarias decididas e implementadas por el Gobierno español y en particular por el Ministro de Sanidad.
Se ha acordado con las Comunidades Autónomas hacer un esfuerzo para coordinar y complementar las políticas de todas las Comunidades en la medida de lo posible, intercambiando experiencias y metodologías en beneficio de todos. Castells se ha comprometido a asegurar dicha coordinación y en poner al servicio de la comunidad universitaria cuanta información y recursos, en particular tecnológicos, el Ministerio de Universidades pueda aportar.